jueves, 14 de noviembre de 2013

Blanca, fria, y divertida...



Caminar sobre la nieve que cubre los cerros es una de las mejores y primeras experiencias que se disfrutan en el viaje de egresados a Bariloche. Primero que nada, para que eso pase, tenes que asegurarte de ir en la época del año correcta…que en este caso sería el invierno. Mucho frío, y mucha nieve.
Por si es la primera vez que vas a encarar la aventura de sumergir tu pie en nieve, aca van algunos consejos muy básicos. Porque definitivamente, la nieve tiene muy poco que ver con el duro cemento de la ciudad. Primero que nada, lo que necesitas saber, es que para evitar cansarte se recomienda evitar subir de manera recta (aún más cuando es empinado) sino hacerlo en forma de zig-zaga en lo posible descansando cada diez minutos.
Algo más que importante, ya que no estamos acostumbrados a caminar sobre terreno tan frío, es evitar que los pies se entumezcan. Esto se logra, por ejemplo, usando dos pares de medias y si es necesario, aislar tus pies de las botas con papel diario (poco glamoroso, pero muy efectivo).
Y no solo de los pies hay que preocuparse, las manos también van a estar expuestas al frio. La mejor forma de cuidarlas es usando guantes térmicos. Ante la falta de éstos, la manera más común de calentar las manos es colocándolas en las axilas o en la nuca.