Caminar
sobre la nieve que cubre los cerros es una de las mejores y primeras experiencias que se disfrutan en el viaje de egresados a Bariloche. Primero que nada, para que eso pase, tenes
que asegurarte de ir en la época del año correcta…que en este caso sería el invierno. Mucho frío, y mucha nieve.
Por si es la primera vez que vas a encarar la aventura de sumergir tu pie en nieve, aca van algunos consejos muy básicos. Porque definitivamente, la nieve tiene muy poco que ver con el duro cemento de la ciudad. Primero que nada, lo que necesitas saber, es que para evitar cansarte se recomienda
evitar subir de manera recta (aún más cuando es empinado) sino hacerlo en forma
de zig-zaga en lo posible descansando cada diez minutos.
Algo más que importante, ya que no estamos acostumbrados
a caminar sobre terreno tan frío, es evitar que los pies se entumezcan. Esto se logra, por ejemplo, usando dos pares de medias y si es necesario, aislar tus pies de las botas con
papel diario (poco glamoroso, pero muy efectivo).
Y no solo de los pies hay que preocuparse, las manos
también van a estar expuestas al frio. La mejor forma de cuidarlas es usando
guantes térmicos. Ante la falta de éstos, la manera más común de calentar las
manos es colocándolas en las axilas o en la nuca.